Encuentros, hallazgos y destellos en el cartel
...y de algunos otros
Jorge Agüero

Jacques Alain Miller sostiene al hablar de la institución de una Escuela "que constituir las soledades en comunidad, no es nada más que subjetivarla"

Desde la lógica de su constitución, se nos presentan dos tipos de comunidades: una, la sociedad que formó Freud, que se apoya en la lógica edípica, cuando muere el padre, se constituye una elite de hermanos; se apoya en la lógica del para todo x". La otra, la de Lacan; presenta la Escuela como un conjunto lógicamente inconsistente, bajo una lógica del "no-todo", y en la que falta una ley de formación. Lo central de esta lógica es preservar esta inconsistencia "como un deber", dado que "es su bien más precioso, es su agalma". Lo que queda entonces, de la falta la ley de formación, es lo que hace ley para cada uno.

Comentaré con Uds. entonces, la experiencia de participación en un cartel. En esa oportunidad, además de ser el primer cartel, se trataba de lo que en aquel tiempo llamábamos: "cartel de borde", para señalar el borde que había que recorrer y atravesar para el ingreso a nuestra institución; pero por sobre todas las cosas, dos características sobresalían notoriamente: la primera es que se trataba de que era yo quien convocaba a la formación del cartel, y la segunda es que este llamado a la conformación del cartel estaba expuesto en el transparente de Escuela. Aun mas, los colegas de la las instancias directivas de la Escuela, en su función de secretaria de carteles, me alentaron a formular aquella convocatoria, pasando esto a constituir el centro de mi participación en ese cartel. La frase con la que sintetizaba la acción desarrollada era: "me oriento por mis amigos". Una frase que alguno de Uds. quizá me hayan escuchado decir en aquellos tiempos, pero que ya hablaba, de alguna manera, del modo de decir el empuje a la formación, y de la relación que esta guarda con los otros en la escuela., para adelantar en lo que quiero formular, son estos otros quienes se formulan en el borde.

Daré un rodeo por conceptos tomados por Lacan en el seminario 19: respecto de la existencia, tomada como negación de la inexistencia, en el seminario 20: referidos a la sexuación, como la cara real de la sexualidad, y, en el seminario 21: respecto de la frase:"el ser sexuado no se autoriza más que por sí mismo,…y de algunos otros".

En esta frase última, Lacan se formula a modo de pregunta sobre cuál es el estatuto de esos otros, aclarando rápidamente que no dice :"en el lugar del Otro", sino que dice :"…y por algunos otros"

Se trata de un pasaje de una lógica que siempre remite al Otro como conjunto simbólico, característico de la lógica del Uno-Todo; a otra lógica, la que ingresa en el campo matemático, en la que lo real pasa a tomar el comando, desde el lugar de lo imposible, lo imposible de escribir.

Lacan acude a esta última lógica, a través de la negación de la inexistencia, de modo de hacer función lógica del vacío.

Asimismo debemos pensar la sexuación como la cara real de la sexualidad, en tanto la sexualidad queda del lado de lo imaginario-simbólico, del lado de lo sintomático del sexo, de aquello que hace suplencia, de esta forma sintomática del espacio agujereado de la proporción sexual, es una manera de establecer un límite, un borde.

Es el goce fálico lo que ubica a los sujetos, de acuerdo a la lógica del "para-todos", dándoles asimismo una existencia ; existencia que el sujeto no está dispuesto a ceder, ya que está sostenida en la excepción, y está limitada por su modo de relacionarse con el goce representado por el objeto. De límite en la medida en que cierra el conjunto de los que conforman el lado hombre, y sin modo de contactar con el S (A/), contacto que si toman quienes están ubicados del lado mujer, que por esto toman relación con la inexistencia del Otro.

Ese goce ilimitado, lo confronta al ser hablante con el vacío de la inexistencia, lo que se comporta como un infinito, haciendo necesario establecer un límite. Lo hace mediante la relación con el goce fálico, así como también una unificación en el encuentro con los síntomas y lo fantasmático. Se le presenta al ser hablante una doble cuestión: por un lado la del vacío de la función, y por otro la de la infinitud de ese vacío.

Teniendo a favor que sabe sobre su no existencia, sabe de lo vacío, de que no existe, no existe alguno que no.

De la negación de esa inexistencia, podrá hacer una existencia, en tanto de ese vacío en la función podrá hacer argumento.

Para esto llevará a cabo una doble operación: el hacer uso de ese saber sobre el goce, y en segundo lugar el de hacer interior ese infinito al que lo ilimitado lo reenviaba.

La primera operación mediante el querer hacer uso de un bien en segundo grado, hacer argumento sexuado, es la manera en que entiendo la primera parte de la frase :"el ser sexuado no se autoriza más que por sí mismo; pero ese goce infinito queda limitado por elementos que antes no estaban en contacto, y que mediante esta nueva reunión en los entornos de este vacío interior ahora, es lo que oficia de límite, de borde, soportando la existencia del agujero, es la manera en que interpreto la parte de la frase :"y de algunos otros". Tomando conceptos de un recorrido por una experiencia analítica, decimos que el ser hablante encuentra su existencia en la negación de la inexistencia, mediante el hacer uso , y que encuentra el límite en la relación con los otros, modo en que ha hecho interior a ese infinito.

Es sobradamente interesante pensar esta relación, desde ambas partes de la frase comentada:"el ser sexuado nos se autoriza más que por si miso" en aquel primer cartel el llamado a la conformación, y la segunda parte:"y de algunos otros", a partir del consentimiento al llamado de los colegas de la escuela. Hoy en día es tan interesante también encontrarse trabajando en la visagra entre ambas partes de la frase, tanto en la autorización, cuanto en la función de algunos otros, como modo de jugar el borde de la inconsistencia de la Institución Escuela.

Siguiendo con los conceptos que propuse tomar del recorrido en una experiencia analítica, en ese mismo seminario Lacan sostiene que hay Escuela en dependencia de lo que hay de analista.