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Nuestro impuro, imperfecto, posible… cartel | Lógicas colectivas | Cuatro+Uno
LÓGICAS COLECTIVAS

Nuestro impuro, imperfecto, posible… cartel *
Osvaldo Delgado

 

1- El cartel, es un pequeño grupo, creado exclusivamente por principios psicoanalíticos.

2- Tiene entre sus finalidades, la producción de investigaciones cualitativas.

3- Siendo un pequeño grupo, por su constitución, opera contra los efectos de grupo, especialmente el de la sugestión.

4- Los goces de la masa, y del solitario, son afectados vez por vez, extrayendo de ahí, saldos de saber.

5- A un mismo tiempo sostiene lo colectivo, y reconduce a cada uno a su rasgo.

6- Es un instrumento idóneo y verificado, para alojar lo que llamamos mutación del trabajo de transferencia, en transferencia de trabajo.

7- Horada los efectos burocráticos del discurso universitario, de las suficiencias, y de las jerarquías.

8- Es antisegregacionista, reconduciendo a cada uno a su segregación estructural.

9- Trata y promueve "lo diferente", sosteniendo al mismo tiempo la empresa conjunta.

10- Preserva un lugar vacío central, aunque aloja las identificaciones.

11- Es el órgano de base de una comunidad epistémica y libidinal, que ha hecho el duelo por el padre y sus diferentes figuras.

12- Es la encarnación, de una teoría de lo colectivo inédita, verdaderamente subversiva, ya que no promueve la aspiración a un todo. Debemos decir en voz alta, que no muchas teorías de lo colectivo podrían arrogarse algo así. El siglo XX, ha sido un ejemplo terrible, de diversas experiencias de lazo social "totalizantes", que portaban en su seno la moral del sacrificio asesino y suicida.

13- Hacia el interior de la Escuela, está al servicio de la formación del analista, hacia el exterior, es un instrumento eficaz para hacer presente en la ciudad, al Psicoanálisis, siendo en verdad un interior-exterior, en banda de Moebius: la ciudad retorna bajo el modo de producir una formación a la altura de la subjetividad de la época y su presencia en la ciudad la afecta, como dice Miller: instalando "la función social de la escucha".

14- Tiene varias funciones de uso. De sus principios han tomado algunos, la cuestión de pensar ciertos dispositivos: por ejemplo el hospital de día, los grupos "monosintomáticos", la llamada clínica entre varios, los equipos de trabajo en Ciencias de la Educación, un contramodelo en la teoría social, etc.

15- Pone en juego una modalidad de la función del tiempo, que afecta tanto la inercia del sin medida, como al imperativo de velocidad, ideal de la posmodernidad.

Es solidario del tiempo lógico.

16- La subjetivación de la falta que produce, es inherente al encuentro con el agujero en la estructura, haciendo ex-sistir el decir, más allá del dicho.

17- La problemática de la pulsión y el saber, es de doble vía. Los efectos de los análisis, se hacen presentes en la vida del cartel, y los productos de éste, retornan en los análisis mismos.

18- Es una práctica, que mediante sus "investigaciones", revela el nudo del psicoanálisis puro con el aplicado.

19- Es un dispositivo que se abre al debate contemporáneo tanto con la filosofía política como con la actual teoría social. Es una experiencia, de más de treinta años, en varias lenguas, suficientemente puesta a prueba en infinidad de Jornadas, Congresos, resultados de formación, nominaciones, etc., que exige el respeto que se merece, y denuncia por su misma seriedad y eficacia, la banalidad de los supuestos instrumentos de verificación cuantitativa estatales.

20- El cartel, tiene una dimensión epistémica y una dimensión libidinal, articuladas como una política de la incidencia del Psicoanálisis, en el malestar en la cultura actual. No es un grupo iniciático, inefable, es un producto de la continuación del "debate de las luces". Su existencia es ética y tiene como función, la puesta a prueba permanente de la responsabilidad de sus integrantes, ya que su "vida" es imposible de sostenerse burocráticamente, como lo son muchos de los dispositivos, que hoy la sociedad de los grandes laboratorios ,con tecnócratas becados por ellos mismos, nos presentan como de "última generación".

Instrumentos del viejo Positivismo, aggiornados al mercado actual.

Por eso, el cartel, debe ser un "no pasarán", respecto a los intentos de reglamentación y verificación cuantitativa, del "super-panóptico", que el desencadenamiento del discurso capitalista promueve a tambor batiente.


* "Nuestro impuro, imperfecto, posible... cartel", en Osvaldo Delgado: Conjeturas psicoanalíticas, JCE Ediciones, Buenos Aires, 2011, pp. 215-217. Texto presentado en la Apertura de las XIII Jornadas Nacionales de Carteles Villa Carlos Paz (Córdoba), 25 de septiembre del 2004.