Cartel en vivo
Silvia Baudini

Irene Kuperwajs, Secretaria de Carteles del directorio de la Escuela, me trasmitió su invitación a escribir para este primer número de Cuatro + Uno . Fue una invitación abierta, seria y provocadora. Abierta porque dejó a mi cargo lo que quisiera o pudiera decir sobre esta cuestión, seria porque fue personal, "quiero tener un trabajo tuyo". Provocadora en el sentido en que Jacques-Alain Miller habla de la provocación en su texto clásico de 1986 [1], se elabora a partir de…, siendo suscitado por…una llamada….

El cartel en la EOL está devaluado, decaído, descangallado, son cosas que se dicen y que por supuesto tienen efectos. Pero lo está si lo ubicamos en el plano del orden simbólico en el siglo XXI. Pero ¿qué ocurre si lo ubicamos a partir de la coordenada del desorden en lo real?

Las sucesivas secretarías de carteles han inventado formas, modos, tratamientos del cartel en la época del Otro que no existe: el cartel ampliado, el cartel institucional, el cartel hospitalario, el cartel 5 + 1, etc. Todo esto da cuenta de las posibilidades de respuesta que tenemos si nos orientamos verdaderamente por la enseñanza de Lacan. Al real sin ley se responde con el malentendido, el cartel 4 + 1, titulo de esta publicación, puede ser 5 + 1, 18 + 1, 7 + 1… Es decir un efecto de interpretación que perturba la defensa.

Lunes 20. 30 prendo mi computadora, entro a skype y recibo un pedido de añadir contacto. Acepto. Comienza la reunión de cartel. 4 + 1, Neuquén- Buenos Aires. El tema "La psicosis ordinaria", los rasgos de cada uno, fueron primero trabajados por mail, intereses diversos ligados a los lugares de inserción laboral, a los impasses que para alguno le provoca la práctica, a la pregunta por "ahora que hablamos de sinthome, se acabó la estructura", "que hacemos con el Nombre del Padre". Mi rasgo, un tema que me implica en mi elaboración actual, "prestar cuerpo".

En esa primera reunión cada uno habla de su rasgo, se presenta un caso clínico, una joven esquizofrénica que con hebillas atenuaba la intrusión de la lengua, yo trasmito mi preocupación por un caso, su desarrollo, mi última maniobra para localizar algo, pasa una hora sin que nos demos cuenta. Nos pasamos bibliografía, ellas (son 4 mujeres) + una, me envían un texto de Maleval. Recuerdo haber leído una cita de Miller sobre el Nombre del Padre, no puedo localizarla, sé que es de Sutilezas analíticas…Prometo buscarla. Nos despedimos no sin antes decirles que deben inscribir el cartel en la Escuela.

Segunda reunión: esta vez con un ruido de fondo, el bebé de una cartelizante que de vez en cuando reclama a su madre. Al final de la reunión me la presentarán.

Esta vez está presente Josefina, ella trabaja en la justicia y se pregunta por la impotencia de los jueces y la decadencia de la autoridad frente a la violencia de la época, "indican exclusión del hogar del marido golpeador, pero a los 2 días está de nuevo en la casa y además el gabinete psicológico recién tiene turno para los dos meses de recibido el pedido" Digo que me parece bueno, dos meses es un buen tiempo para que la urgencia tome la forma que conviene a la escucha analítica. Otro miembro del cartel agrega, en off, "si claro sino es un bombero". Me interesa el tema de la urgencia y pude decir lo que considero que es la urgencia para el psicoanálisis: el empuje de la pulsión y eso no tiene tiempo.

Lucía, alguien que siempre se interesa por la práctica relata un caso y sus vicisitudes, cómo localizar algo en un sujeto en errancia. Pude encontrar la frase: El Nombre del Padre es el nombre del modo de gozar captado en su carácter universal. Ana no estaba así que pedí le anoten la frase. Concertamos una nueva cita en un mes para volver a encontrarnos, esta vez con el horizonte de la Jornada de Carteles de Córdoba, el 15 de septiembre. Cada una escribirá una página que preanuncie el trabajo por venir.

Pienso el cartel como uno por uno y por eso trasmito este recorte de una experiencia. Inédita para mí. Espero tenga el valor de una provocación.